La jornada forma parte de las actividades de la pertenencia de este plantel al programa Eco Schools
En un ejercicio ciudadano de transparencia, rendición de cuentas e involucramiento ciudadano, la diputada del Congreso de Jalisco, doctora Mara Nadiezhda Robles Villaseñor, dialogó con alumnos de la Escuela Politécnica “Ing. Jorge Matute Remus” de la Universidad de Guadalajara (UdeG) referente de la iniciativa que promueve, denominada Agua Potable para todas y todos.
Acerca de esto, la también académica puntualizó que a pesar de que el suministro que le corresponde a la empresa estatal denominada Sistema Intermunicipal de los Servicios de Agua Potable y Alcantarillado (SIAPA) identifica que el agua que llega a los hogares es potable, en realidad no lo es, puesto que no puede ser consumida para el uso diario e incluso no existen garantías que pueda usarse para fines de aseo.
Señaló que uno de los problemas principales radica en el estado de las tuberías, las cuales presentan deficiencias, mientras que otro de los inconvenientes que agravan la situación radica en la situación de los vasos naturales, que se explotan para llevar el agua a la ciudad, entre los que subrayó los casos de Chapala y el Río Santiago.
Recordó el antecedente de Miguel Ángel, el niño que cayó al Río y falleció por haber tragado agua contaminada, esto durante la administración del gobierno de Emilio González Márquez. Respecto a Chapala expuso que académicos del Centro Universitario de Ciencias Biológicas Agropecuarias (CUCBA) revisaron el agua del lago y señalaron que no garantizan que sea sana ni para el aseo, puesto que se reporta la presencia de algas que pudieran representar índices de toxicidad.
Robles Villaseñor apuntó que este escenario ha condicionado a que los ciudadanos del Área Metropolitana de Guadalajara (AMG) paguen dos veces por el agua, una por el servicio del SIAPA y otra para comprar agua de consumo en garrafones y/o botellas: “intervenir la tubería para que se convierta en agua de consumo requiere que los diputados inviertan 8 mil millones de pesos que no es mucho dinero; ahora, las y los ciudadanos gastan más de 2 mil 300 millones de pesos en garrafones de agua al año”.
En este sentido, expuso que este modelo que se ha instaurado por décadas condiciona a que la venta de agua embotellada sea un negocio que en realidad se genere un indicador muy considerable de contaminantes, por el desecho de botellas: “Los jóvenes tienen la fuerza e inteligencia para que eso cambie. En ciudades como México, Aguascalientes, eso es posible. No solo en lugares como Nueva York se puede hacer”.
Anunció que por ahora ya se trabaja una propuesta que emanará desde la UdeG para que los diputados puedan sentarse a discutir un plan integral de manejo y uso de agua, que involucre asuntos de captación de agua pluvial, aprovechamiento del recurso y sobre todo, que se plantee la posibilidad de ser más severos con las empresas que contaminan o hacen uso excesivo del agua, que es de todas y todos.
“Iniciaremos desde la Universidad para trabajar en construir una institución que pueda ser sustentable. El objetivo de estar aquí es traerles información que ustedes puedan discutir en su entorno y que les pueda llevar a la acción. Una cosa que requieren los jóvenes es tener una causa. La diferencia entre un país desarrollado y uno en vías de serlo, radica en el agua, en si se tiene o no una gestión adecuada”.
Al finalizar diversos estudiantes de la Escuela Politécnica “Ing. Jorge Matute Remus” realizaron preguntas y/o comentarios referentes al tema; asimismo, una comisión interna de jóvenes se comprometió a tomar el asunto y dialogarlo al interior para diseñar un plan interno de manejo del agua que abone a mejorar las condiciones del entorno.
Esta dinámica formó parte de las actividades que se realizan en dicha comunidad referentes al Comité de Eco Schools México, del que este plantel y otras Prepas UDG forman parte como promotores de iniciativas de impacto positivo al medio ambiente.